Para KENZO, el rey de la jungla no es el león, sino el elefante. La cabeza hacia el cielo, representa un buen augurio en una naturaleza imaginaria. Para KENZO, la jungla abundante y exuberante tiene su perfume. Una invitación para un viaje mestizado…
Un floral especiado con carácter, iluminado por la Mandarina y el Cardamomo. Luego, el Heliotropo, el Clavo y el Mango se abren deliciosamente. Por último, Ylang-ylang, Regaliz, Pachulí y Vainilla firman esta estela sensual, por Dominique Ropion.